¿ Existe el purgatorio ?

Una de las grandes divergencias entre Católicos y Protestantes es por la existencia y creencia de que existe un lugar indeterminado llamado Purgatorio.Los protestantes piensan que; si Jesús dio su vida en la Cruz por nosotros su sangre redime todos los pecados y por lo tanto ya, con creer que Jesús dio su vida por nosotros, estamos salvos (salvados) y ya somos ciudadanos del cielo y hacia allá vamos directamente sin importar nuestras acciones. Para nosotros los Católicos,Jesús inició nuestro proceso de salvación al dar su vida en la cruz pero nosotros con nuestras acciones (obras) completamos el proceso; en otras palabras para nosotros, la salvación no es automática la salvación nos la ganamos con nuestras acciones. Jesús puso a nuestro alcance nuestra salvación con su muerte redentora.Analógicamente Jesús nos dio la semilla del árbol de la Salvación; nosotros los sembramos, lo abonamos, lo regamos, lo cuidamos con esmero , le arrancamos las malas yerbas(el pecado) y lo hacemos crecer y dar fruto.
Los Católicos creemos que existe el cielo y también un infierno.Existen dos tipos de pecado el pecado venial y el pecado mortal; el que muere sin pecados o con pecados veniales va al cielo, el que muere en pecado mortal va al infierno.Todo ser humano, menos Jesús,(los Católicos incluimos a la Virgen María) ha pecado por lo que no puede ir directamente al cielo sin escalas.Toda persona cuyo finalidad es ir al cielo debe experimentar un proceso de purificación al cual llamamos purgatorio.El purgatorio es un estado atemporal(escala necesaria) en donde nuestra alma se putifica para ir al cielo.Sigamos este ejemplo :
Cualquier persona, por mejor que sea, ha cometido pecados o tiene defectos por lo cual, no entra directamente all cielo,sino que tiene que pasar un proceso de purificación gradual y atemporal llamado purgatorio.
Atemporal significa que si para el cuerpo transcurre "tiempo" para las almas no transcurre el tiempo; el espíritu sobrepasa la limitación de lo que llamamos tiempo o movimiento. Los Católicos pensamos que aceleramos el proceso, rezando u orando por el difunto, ofreciéndole misa para el descanzo del alma y otros rituales religiosos. El creyente también acelera el proceso preparándose espiritualmente para su muerte, recibiendo los Sacramentos y despegándose de lo corpóreo y material.Mención especial para aquéllos que sufren y o están enfermos pero conservan y hasta aumenta su fe; esos quizás comenzaron el purgatorio en vida y si aceptaron su enfermedad y no renegaron de Dios tienen un camino adelantado.No debemos ver el purgatorio con esa visión dantesca de dolor y sufrimiento y sí con alegría porque es la antesala al tan deseado Cielo.