Ee mi vida, he recibido varios llamados.Algunos de de estos llamados fueron humanos ;otros han sido espirituales. Recibí llamados para ser catequista, para ser equipista de la Juventud de Acción Católica de Santa Elena,para ser responsable parroquial, para trabajar en retiros para jóvenes de la Acción Católica (Jornadas de juventud),para dirigir retiros de juventud en la Comunidad de Santa Elena, para reunir a más de trescientos equipistas los miércoles por cerca de tres meses en la Capilla de Santa Elena dirigidos por el dinámico y carasmático Padre holandés Antonio Pons en la época de efervescencia de la JAC en Bayamón y especialmente en Santa Elena. Para ayudar a fundar La Juventud de Acción Católica en la Iglesia Catalina de Sienna, para trabajar por trece años en El Víacrucis de la urbanización Santa Mónica.
Mi próximos llamados fueron casi conjuntos: convertirme en maestro y casarme y formar una santa familia.De estos llamados casi se cumplen 30 años; en octubre y diciembre de 2010. Dios me dio el talento de escribir; escribí inspirado por el Espíritu dos obras de teatro para adolescentes: Prohibido Comunicarse y El Vendedor de Ilusiones y decenas de reflexiones , cuentos y microcuentos.Soy maestro de Español y buen ejemplo como educador , dirigente deportivo y consejero de jóvenes.
Por un tiempo pensé que tenía vocación para ser sacerdote, no lo fui, pero como maestro siempre le he enseñado los valores de amor al trabajo,el apego a la justicia y el no predicar o fanfarronear ser Cristiano sino actuar como tal.
martes, 12 de enero de 2010
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